La domótica antes de la llegada de HomeKit era algo que muchos ni se planteaban: los distintos protocolos y la dificultad para configurar una centralita (tanto por conocimientos como quizás por presupuesto) hacían que este mundo quedara fuera del alcance de muchos. Sin embargo, en los últimos años el protocolo para controlar dispositivos inteligentes de Apple está llamando mucho la atención.
La popularización de estos dispositivos ya llega más allá de las conocidas bombillas que cambian de color y se controlan – y automatizan – remotamente: hoy en día tenemos una increíble variedad de oportunidades para añadir un escalón más en la inteligencia del hogar, que van desde controles de presencia, timbres con cámara conectadas o control de sistemas de riego.